SAS (Abrera) - Fábrica ocupada en Catalunya

Entrevista al presidente del comité de empresa

 El pasado 3 de marzo la empresa SAS Abrera, proveedor de SEAT, paralizó la producción, entregando la carta de cierre a los trabajadores. Los diez días previos la empresa trató de reventar los nervios de la plantilla, no presentándose los directivos en la empresa, pero a pesar de ello los trabajadores aguantaron, produciendo y sacando pedidos.

La excusa es la ruptura del contrato con SEAT pero el objetivo real es profundizar en la ofensiva patronal contra los derechos laborales, dar un escarmiento a una plantilla caracterizada por sus recientes luchas y allanar el camino para continuar con la escalada de cierres de empresas. SEAT ha anunciado su intención de suprimir el 10% de la plantilla, a la vez que otra empresa auxiliar, Copo, en Vilanova del Camí, también anuncia el cierre.

Esta es la consecuencia de haber aceptado por parte de los dirigentes sindicales los argumentos de la multinacional, entre ellos el de que había que externalizar la producción. Por eso, tanto en la lucha de hace un año como ahora, desde nuestro punto de vista es necesario unificar los conflictos de las empresas auxiliares con la de los trabajadores de SEAT. La táctica de la multinacional es dividir, la de los trabajadores debe ser unificar.

Los trabajadores, correctamente, han ocupado la fábrica para evitar el cierre patronal, y celebran dos asambleas diarias, en los cambios de turnos. Al final de una asamblea el miércoles 7 de marzo, los compañeros de El Militante y del Sindicat d’Estudiants pudimos hablar con el presidente del comité de empresa, Emiliano Jiménez, que nos transmitió estos breves comentarios sobre la lucha que acaba de empezar.

EM: SAS plantea el cierre, ¿por qué motivo?

Emiliano Jiménez: La razón que aduce la empresa para el cierre es la no adjudicación del salpicadero de una nueva versión del Ibiza por parte de Seat a SAS. En principio, teníamos trabajo hasta el primer trimestre del 2008 según los contratos entre Seat y SAS. Ahora parece que las negociaciones entre cliente y proveedor han ido por otro lado, pero se han olvidado completamente de la cuestión fundamental, que somos los trabajadores. Esto hace tiempo que lo están preparando y sólo al final hemos tenido conocimiento de lo que pretendían.

EM: La empresa ha anunciado el cierre pero no ha presentado ningún ERE. ¿A qué crees que se debe esto?

EJ: SAS se ha saltado toda la legalidad en este aspecto. Antes de anunciar el cierre han estado buscando la manera de que cayeramos en sus provocaciones. Querían presentarnos como los responsables de la rescisión del contrato de Seat llevándonos a una huelga y al conflicto. Ahora han anunciado el cierre, sin ni siquiera guardar las formas de presentar un expediente de regulación de empleo. Exijimos de la Administración una respuesta contundente ante la ilegalidad que está cometiendo la empresa. No se puede permitir que Seat y las empresas proveedoras jueguen con los puestos de trabajo de esta manera. No me parecería extraño que esta manera de proceder fuera una prueba de las empresas del sector del automóvil para presionar a la Administración, al gobierno, de cara a flexibilizar aún más las condiciones para los EREs, es decir, más facilidades para los despidos.

(Finalmente la empresa ha anunciado que presentará un ERE el martes 13 de marzo, aunque claro está de que esto no resuelve el conflicto)

EM: Desde el anuncio del cierre habéis ocupado las instalaciones de la fábrica y organizado turnos para impedir que salga ni una sola máquina de la planta. ¿Qué otros pasos tenéis previsto dar?

EJ: Esta lucha es por defender los puestos de trabajo, no para que nadie, ningún sindicato, se financie de esta tropelía, de esta barbaridad. CGT es el sindicato mayoritario en el Comité de Empresa y desde luego esto lo vamos a defender a rajatabla. Todos los pasos se están discutiendo y decidiendo en las asambleas. Si en algún momento tenemos que elegir una comisión negociadora con la empresa, ésta la elegirá la asamblea.

EM: Los compañeros de la corriente marxista El Militante defendemos la nacionalización para garantizar todos los puestos de trabajo, tanto en Delphi como en el caso de Seat y las empresas auxilares.

EJ: Sí, cuando la lucha de Braun, desde CGT también planteamos la nacionalización. Estoy de acuerdo con esta cuestión. Aquí todavía no nos hemos planteado seriamente este tema. Hemos empezado por exigirle al ayuntamiento de Abrera y a la Generalitat que se personen como acusación en la demanda que hemos puesto a SAS. El gobierno de la Generalitat es un gobierno que se debe a los trabajadores, que son los quienes los han puesto donde están. Que yo sepa, las multinacionales no votan. Mueven los hilos sin necesidad de votar. Pues bien, ahora el gobierno, según como actúe, va a demostrar con quién está.